Breve historia de los combatientes hispanoamericanos en la Guerra del Rif
Por Francisco de Lizardi
Hallándose expatriado en Nueva York acusado de rebeldía contra el gobierno de Álvaro Obregón, el mayor mejicano Jesús San Juan ideó la formación de una unidad de voluntarios mejicanos destinada a Marruecos, sin la autorización del gobierno de Obregón. Para finales de 1921, se forma la Compañía de Nuevo Orleans compuesta por mejicanos, veteranos de la Revolución, asentados en los Estados Unidos. Destacan entre la unidad Guillermo Rubio Navarrete, Santiago Buitimea y Jesús Bacasegua, quien fuese condecorado por Dámaso Berenguer.
Los legionarios de Nuevo Orleans, integrados en la 16ª Compañía Cuarta Bandera, recibieron su bautizo de fuego en la toma del vado de Cudiasarriet. Un año más tarde, en julio de 1922, el gobierno español abrió la primera convocatoria en todos sus consulados en Hispanoamérica solicitando voluntarios para la recién creada Legión Extranjera de España en Marruecos a cargo del entonces teniente coronel Millán-Astray. Paradójicamente, el general Álvaro Obregón, presidente de Méjico, envió un total de tres batallones de voluntarios de origen yaqui radicados en Xochimilco, Distrito Federal, al Tercio Extranjero; tratándose del único envío oficial de tropas recibido por España durante la guerra.
En julio de 1922, los voluntarios mejicanos fueron embarcados en Veracruz en el transatlántico español «Alfonso XIII», uniéndoseles el resto del enganche hispanoamericano en La Habana, Cuba, compuesto por voluntarios de Argentina, Venezuela, Colombia, el Caribe y Centroamérica. Tras ser concentrados en Cádiz, se organizó la expedición hispanoamericana, repartiéndole en distintos contingentes. Se les destina de manera próxima a las ciudades de Ceuta, Tetuán y otros asentamientos del protectorado.
Los mandos de la totalidad de los contingentes hispanoamericanos se dieron al capitán mejicano Agustín Ordaz Sánchez, combatiente villista y luego carrancista durante la Revolución, y al coronel Luis Sánchez Cerro, futuro presidente del Perú. Participaron en la toma de Melilla, las campañas de Ambar, Tizzi-Azza, Tifaruin, Sidi Mesaud, Afrau, Cobba-Darsa, Gorgues, Aforit, Kudia-Tahar y Monte Malmusi, así como en la retirada de Xauen a Tetuán, el desembarco en la bahía de Alhucemas.
A causa de distintas protestas internacionales, la mayoría de legionarios hispanoamericanos fueron repatriados previo al termino del conflicto en 1923. El día en que fueron embarcados, las bandas de música militares españolas y francesas tocaron sus respectivos himnos nacionales. Los tres batallones de indios yaquis enviados por el gobierno de Obregón permanecieron en Marruecos hasta 1925. Algunos de ellos prolongaron su estadía en la Legión Extranjera, permaneciendo en España, como fuera el caso de Jesús de San Juan.