Zapatistas y cristeros: expresiones de la mexicanidad iliberal
Por Francisco de Lizardi
«La cultura alternativa en un pueblo estriba en un reencuentro con sus raíces, y en esa dimensión, adquiere la connotación de una rebelión contra la civilización posmoderna y desmontable, para afirmarse como el destino y la exigencia de un linaje.»
—José Luis Ontiveros
En su libro La Cuarta teoría política, Aleksandr Dugin identifica a los zapatistas del EZLN dentro de lo que catáloga como «nacional-izquierdismo», tratándose de un movimiento de raigambre socialista libertaria ideológicamente próximo a postulados anarcocomunistas, municipalistas y autogestionarios de mano a una carga identitaria nativista profundamente contraria a los valores liberales del orden unipolar. «Los zapatistas —indigenistas— están motivados por esta idea de reafirmación de la identidad», señala Dugin durante una entrevista concedida en abril de 2021.
El discurso nacionalista del neozapatismo gira entorno a un enfoque étnico-cultural que desafía el entendimiento y la noción existente de lo mexicano surgida a partir del mito integrador de la «nación mestiza» promovido durante el régimen posrevolucionario, abogando por una suerte de autonomía particular ciertamente próxima al principio naturista de sangre y el imperativo territorial del suelo sin apelar nunca a la desunión nacional, entendiendo así al elemento indígena como una identidad soberana y articulada —que no asimilada ni integrada en cuanto a la «fundición» de su otredad— distinto a la narrativa mesticista e igualadora que ha caracterizado al equivoco patriotismo mexicano institucional.
Ello representa una forma completa, orgánica y destendida de la «mexicanidad» que habría de superar los muchos paradigmas de la identidad nacional, reafirmando así el sentido diferencial que constituye la mística de la patria mexicana. Reivindicar la identidad personal desde el ámbito individual, regional y local mientras se aspira a un frente común mediante la articulación de entidades naturales en lo que habría de ser un proyecto nacional es lo que han venido proponiendo los guerrilleros zapatistas. Ser lo que somos y no dejar de serlo; enarbolar la bandera de una auténtica identidad frente a la homogeneidad cosmopolita promovida por las élites demoliberales en un esfuerzo por reducir la unicidad de los pueblos.
Esta renovada orientación en cuanto al significado de la personalidad mexicana permite sumarse a los esfuerzos de resistencia civilizacional, entendiendo al neoliberalismo y la globalización como enemigos de las culturas y la sustancia humana. Así lo plantea el Subcomandante Marcos, exlíder militar, ideólogo y vocero del EZLN:
«Todas las culturas forjadas por las naciones —el noble pasado indígena de América, la brillante civilización de Europa, la sabia historia de las naciones asiáticas y la riqueza ancestral de África y Oceanía— son corroídas por el estilo de vida americano. De esta manera, el neoliberalismo impone la destrucción de naciones y grupos de naciones para reconstruirlas según un modelo único. Esta es una guerra planetaria, de la peor y más cruel clase, librada contra la humanidad.»
Señala también Marcos el desplome del Estado-nación y la irrupción cultural del liberalismo «al producir [la globalización] su despoblación cualitativa, excluyendo a todos aquellos considerados no aptos para la nueva economía». La narrativa política del neozapatismo adhiere además apertura e interés por una causa común internacional contra el imperialismo mercantilista y su influencia destructora, tratándose entonces de un movimiento socialista identitario de naturaleza aliberal. A ello se suma el rechazo que el EZLN ha ostentado ante intentos de influencia posmodernista en sus espacios políticos, llegando incluso a expulsar expositores de Nueva Izquierda cuyas ideas consideraron como de «origen burgués» y sencillamente ajenas.
Para Dugin, el episodio contemporáneo del zapatismo coincide con el ejemplo histórico del alzamiento cristero al ser ambas ratificaciones combativas y populares del espíritu nacional frente a la hegemonía liberal imperante en sus distintas formas, esto pese hallarse en zonas ideológicas aparentemente opuestas. Trazado este esquema, lo trascendente ha de imperar ante distinciones políticas obsoletas y superables permitiendo así la conjunción entre heróicos ideales al servicio de la nacionalidad. En la antes mencionada entrevista, Dugin sugiere lo siguiente:
«Los zapatistas eran representantes de la lucha de la izquierda, pero también lo eran los cristeros de la lucha desde la derecha contra el liberalismo mismo: el liberalismo masónico y el liberalismo burgués. Por eso la idea la Cuarta teoría política es no oponer a zapatistas y cristeros, sino unificar, unir, todas las fuerzas antiliberales en un frente común.»
No oponer a los zapatistas de los cristeros, así como los nacional-bolcheviques rusos se propusieron conciliar elementos de su pueblo históricamente enfrentados en pro de un entendimiento antiliberal. Se trata de algo más que simple rojipardismo; ello vendría a ser la íntegra expresión de una honda y aguerrida tradición campesina, hispanoamericana y revolucionaria frente al mismo modelo al que católicos, socialistas y agraristas combatieron en armas en 1910, 1926 y 1994 respectivamente. Decía el poeta hispanista nicaragüense Pablo Antonio Cuadra que la Revolución mexicana y la Cristiada habían sido ambos movimientos de floración vernácula, «hurdiendo su estilo y hallando su origen y originalidad, en lo particular y definitivo de su nación y de su pueblo.»
Siendo capaces de alcanzar la comunión entre manifestaciones comparables de un mismo ímpetu de resistencia y heroica proclama habiendo superado el sesgo historicista de quien puede hallar valor en cada ejemplo de virtud y honra que su pueblo ha gestado, nos veremos entonces en situación de aspirar a la exigencia nuestro destino.
Bibliografía:
Dugin, A. (2015). La Cuarta Teoría Política. Fides Ediciones.
Zero Schizo. (2021, 23 de abril). El Cholocast #51: Noomakhia, Platonismo Político y el Mundo Multipolar c/ Alexander Dugin [Video]. YouTube.
Cuadra Cardenal, P. A. (1945). Promisión de México. Jus.
Subcomandante Marcos. (s. f.). AcademiaLab. https://academia-lab.com/enciclopedia/subcomandante-marcos/